En mi carta no quiero opinar sobre si es o no adecuado tener perros, lo que sí opino es que en una ciudad no es ni higiénico ni ecológico por lo que representa en suciedad: tanto por el orín -hay zonas de Barcelona donde el olor es inaguantable- como por los excrementos. Esto último, si el dueño es mínimamente cívico, recoge las deposiciones con una bolsita de plástico. Si nos paramos a pensar el número de bolsas de plástico que se usan diariamente para esos menesteres es, como mínimo, para pensar.
Entretodos
Diariamente nos bombardean con la idea de que por razones ecológicas no usemos bolsas de plástico. Supongo que esta advertencia es para todos, pues se podría exigir que se usaran bolsas de papel para la recogida de excrementos.