Leí el otro día en este diario un articulo en el que Pau Donés nos narraba las vicisitudes diarias de su lucha contra el cáncer desde su casa de Formentera.
Entretodos
Playa, hospital de Formentera, quimioterapia, baño...ilustrado por una imagen posando en bañador mientra recibe su tratamiento.
Anoche me volvieron a mencionar el artículo. Y lo lamenté mucho. Lamenté no tener una casa en Formentera. Lamenté no tener playa. Lamenté no poder nadar. Lamenté no poder hacer la quimioterapia en bañador.
Pero lo que más lamenté es que lo único que me une a él sea padecer cáncer. Pero como siempre, todo depende.