La esperanza es lo último que se pierde, o eso dicen. Todos los solteros que acuden a 'First Dates', o casi todos, van con la esperanza de encontrar el amor, incluso después de haber tenido malas experiencias. Es lo que le sucedió a Isabel, que acudía al programa para cenar con Juan Antonio.
Isabel es una mujer de pueblo, a la que le gustan mucho los animales. La soltera llegaba al restaurante de Carlos Sobera después de 3 relaciones que no acabaron bien. Una porque no había feeling, otra porque su novio la dejó después de su accidente, y la última porque era tóxico. "Mi padre dice que los cojo con un alfiler y elijo los peores", resumía sobre sus experiencias amorosas.
A pesar de eso, ella no pierde la esperanza en el amor, y busca a un hombre alto al que le gusten los animales. "Quiero a una persona en la que pueda confiar, a parte de mi familia y de mi madre", decía entre lágrimas.
Tras contarle todo esto al presentador, Sobera le ha presentado a su cita de esa noche: Juan Antonio. Él es un hombre que trabaja en el campo, y que busca una mujer que lo enamore.
Ya en la mesa, los dos han podido conversar más tranquilos, y el soltero le ha preguntado a su cita si tenía hijos. Isabel le ha respondido que tiene una de 10 años, y además le ha contado que tiene animales. Su cita le ha explicado que no le gustan los gatos, pero sí han coincidido en un gusto particular: los dos son amantes de una buena barbacoa.
A ella no le ha gustado que Juan Antonio fuera cazador, pero ha entendido su hobbie. En el terreno amoroso, ambos han compartido su deseo de poder encontrar una amistad, y que no querían casarse.
En la decisión final, no ha habido flechazo por parte de ninguno, pero a Isabel le hubiera gustado poder conocer más a su cita porque viven cerca, aunque para él esto no ha sido suficiente.