Si hasta ahora los datos oficiales sobre el coronavirus era evidente que ofrecían sólo la punta del iceberg de expansión de la epidemia, dado que sólo incluyen a los contagiados y fallecidos a los que previamente se ha realizado un test para determinar que efectivamente se han contagiado, lo que ha dejado fuera a miles de fallecidos en residencias, este viernes la situación ha llegado al esperpento, con el Gobierno corrigiendo la serie histórica después de reconocer que se han producido “distorsiones” y achacar parte de la culpa a Catalunya, por haber informado hasta ahora por dos fuentes distintas, si bien no ha sido la única autonomía que ha ido por libre a la hora de comunicar los datos.
El caos en los datos sobre el coronavirus va a más y Sanidad trata de poner orden (leer noticia)