Cáncer y terapia

María José llora mientras escucha hablar a su compañera Cecilia. Porque han sufrido. Y sufren. Las dos son unas supervivientes y lo saben. Es lo que tiene pasar por algo gordo, muy gordo, lo que hace que los recuerdos se agolpen en formato lágrimas en los ojos. No es para menos. Ambas pueden decir que han ganado la batalla, la primera, al cáncer de mama en mitad de una pandemia mundial y todo lo que eso conlleva.

"El cáncer de mama no termina con la quimioterapia, las secuelas son muchas" (leer noticia)