Los rebeldes sirios que resisten en la sitiada ciudad de Alepo han pedido este miércoles un “alto el fuego inmediato de cinco días” para poder evacuar a civiles y heridos bajo control de la ONU, pero no han dado indicios de que vayan a retirarse, como exigen el régimen del presidente Bashar el Asad y sus aliados rusos e iranís. La desesperada petición coincide con el fuerte empuje de las tropas de Asad, que en los últimos 10 días de ofensiva han pasado a controlar casi el 75% del territorio que hasta ahora estaba en manos de la oposición, que aglutina desde moderados hasta yihadistas.
Los rebeldes piden un alto el fuego inmediato en Alepo para evacuar a civiles y heridos (leer noticia)