Vehículos

Este es el verdadero significado de verdad la letra L de los coches automáticos

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Cómo conducir un coche automático

Aleix Voltà

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Los coches con un sistema de cambio automático suponen una auténtica revolución frente a los cambios manuales. A diferencia del sistema tradicional, los coches automáticos son capaces de realizar el cambio de marchas sin que el conductor utilice el embrague.

Igual que en los manuales, los coches automáticos cuentan con una palanca ubicada entre los dos asientos frontales. Este dispositivo, que tiene letras en lugar de números, sirve para regular el modo de marcha del vehículo,

Modos de marcha

El significado de cada modo es desconocido para muchos, incluso para algunos poseedores de coches automáticos. Es conocido que, por ejemplo, la P, de parking, sirve para mantener el coche inmóvil, o que la D sirve para desplazar el vehículo hacia adelante.

Sin embargo, existen modos que se utilizan de forma recurrente y cuyo significado es todavía desconocido para muchos conductores. Se trata de la letra L, inicial de 'low', que en español se traduce como 'bajo'.

La letra L sirve para aumentar la potencia del motor en bajas velocidades. Este modo de marcha, similar a una primera o segunda marcha manual, sirve para facilitar la subida de pendientes o para mantener la tracción durante grandes descensos.

Otras letras

En la misma palanca automática se encuentran otras letras, cada una asociada a diferentes modos de desplazamiento del coche automático:

  • Letra R: reversa. Desplaza el coche marcha atrás.
  • Letra N: neutral. Al igual que en los coches manuales, este modo sirve para poner el vehículo en punto muerto.
  • Letra S: secuencial. Sirve para cambiar a un modo en que, similar a un coche manual, el conductor puede controlar las marchas con el pedal de velocidad.
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Hay que tener en cuenta que la letra puede variar según el fabricante del vehículo. Por ejemplo, según el modelo, la letra L se puede cambiar por un número, como el 1 o el 2.

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