Las cremas de chocolate con avellanas o cacahuete y en general todos aquellos productos en forma de pastas envasadas en tarros presentan un gran inconveniente: rebañar las últimas cucharadas. Tanto si eres más de Nutella (o Nocilla) como si te has pasado a la moda de la crema de cacahuete, la peor parte de consumir estos artículos llega cuando hay que dejar impoluto el recipiente, algo que difícilmente sucede. Así pues, muchas personas terminan por malbaratar parte de un producto totalmente aprovechable.

Por suerte, existe un truco muy simple para limpiar hasta la última gota de crema. Para lograrlo, basta con utilizar un ingrediente que se puede encontrar en cualquier cocina.

Ni jabón ni productos químicos

Antes que recurrir a otros métodos, es importante destacar que la limpieza de los tarros puede efectuarse por medio de agua caliente. Simplemente debes llenar el tarro, cerrarlo y agitarlo hasta que aprecies como las manchas del cristal van desapareciendo.

Eso sí, en caso de que esta medida no sea suficiente, puedes recurrir a otra vía más efectiva. El líquido empleado, lejos de ser un jabón o producto químico, se trata del aceite. Bañando con óleo la cuchara que utilices durante el lavado conseguirás acabar de retirar los restos de crema de las paredes del tarro.