Limpiar un coche por dentro es algo que puede llegar a ser muy complicado si se quiere hacer bien y a fondo. Y es que el uso diario del vehículo hace que todos los elementos del mismo pierdan su aspecto original. Sobre todo, si no se hace una limpieza frecuente del mismo.
Y la tapicería de los asientos es una de las partes más complicadas. Polvo, migas, arena o tierra, algún líquido que se derrame, ceniza (si se fuma dentro del vehículo)... todas estos elementos pueden provocar manchas antiestéticas y suciedad que, con el tiempo, son difíciles de eliminar.
Cosas a evitar
Es por ello que conviene evitar fumar y comer y beber en el coche, así como sentarse con el pantalón sucio de barro.
Pero tampoco está de más limpiar la tapicería. Para hacerlo y dejarla impecable, lo primero que hay que hacer es retirar los posibles objetos que haya: monedas, papelitos, restos de comida o plásticos...
Tras ello, aspira los asientos para quitar los restos que no hayas podido quitar a mano, como por ejemplo las migas.
Productos caseros
Finalmente, conviene limpiar la tela. Para dejar la tapicería inmaculada, nada mejor que agua y amoniaco. También es útil usar agua y jabón o vinagre blanco y bicarbonato de sodio.
Si hay manchas profundas, puede que no baste con un limpiador común y haya que usar productos específicos antimanchas. En ese caso, conviene extraer la tela si es posible y lavarla en la lavadora.