La Conselleria de Polítiques Digitals i Territori de la Generalitat comenzará este martes por la noche las obras para retirar las infrastructuras de los puestos de peaje que hasta ahora funcionaban en las autopistas C-33 y C-32.
En concreto serán los peajes de la C-33 en Mollet y los de la C-32 en Vilassar, que ya habían levantado las barreras para evitar el pago.
Hasta ahora los vehículos debían pasar por los carriles habilitados para los antiguos peajes a un máximo de 30 km/h. Los conductores se encontraban con un letrero que les recordaba que no había peaje y les instaba a no pararse y provocar un atasco.
El Govern ha pedido a las empresas concesionarios que aceleren las obras para desmantelar las infraestructuras de los peajes para así dar más continuidad a la capacidad de los carriles.