Barcelona y su área metropolitana verán este jueves, 28 de abril, cómo las nubes se irán retirando progresivamente. Sin embargo, el cielo no quedará limpio del todo. El polvo sahariano en suspensión mantendrá el ambiento turbio e impedirá disfrutar del sol abiertamente.
Las nubes comenzarán su retirada por la mañana, aunque lo harán dejando tras de sí un incremento del viento de levante. Se espera que las rachas superen los 40 kilómetros por hora, lo que encresperá el mar. Las temperaturas aumentarán ligeramente.
El viernes volverán las nubes. No parece que vaya a llover en la ciudad de Barcelona, pero los chubascos (que podrían ser con tormenta) caerán muy cerca. El sábado también será inestable, aunque habrá que esperar un poco para precisar hasta dónde llegan las lluvias.