El decreto de la sequía en fase de emergencia 1, aprobado el pasado 1 de febrero, dicta que las piscinas municipales quedarán cerradas, algo que ha dado por decir y a lo que se han opuesto los ayuntamientos que forman parte del Consell d'Alcaldías del Vallès Occidental, entre ellos Terrassa que pide la apertura de piscinas como refugios climáticos.
En este marco, la Comisión Informativa de Territorio y Sostenibilidad ha confirmado que la piscina municipal de Vallparadís se está reparando debido a algunas fugas de agua que se han localizado, según ha informado el Diari de Terrassa.
Así, el decreto por falta de agua prohíbe llenar las piscinas (de forma parcial o total) en excepción de las que se utilicen para la práctica deportiva federada o las de uso terapéutico (ubicadas en hospitales, residencias, centros de educación especial).