Xavier Sardà 'ha muerto' fulminado por los marcianos mientras tocaba el saxo y el funeral se celebrará el lunes, 10, a las 22.00 hora,s en #0. Porque el popular periodista que presentó durante años 'Crónicas marcianas' es el invitado de esta semana del espacio del canal de Movistar+, 'El cielo puede esperar', que recrea ficticios sepelios de personajes famosos.
Entre las no menos famosas personas que le darán su 'último adiós' se encuentran compañeros radiofónicos como Gemma Nierga y Juan Carlos Ortega; televisivos como Boris Izaguirre, Ramoncín y hasta el mismísimo Paco Marhuenda, su gran oponente ideológico en la tertulia de 'La Sexta Noche' (La Sexta).
El comunicador, rodeado por Santiago Segura, Gemma Nierga y Boris Izaguirre, entre otros. /
Desde el limbo
La banda sonora que amenizará el acto correrá a cargo de 'Los Vengamonjas, representación viviente de qué sucede cuando creces viendo un programa como 'Crónicas marcianas', y de Leonardo Dantés, que le dedicará un homenaje final inenarrable acompañado de un arpa y sus famosos pañuelos.
Y todo esto lo podrá ver desde el limbo del programa producido por Movistar+ en colaboración con Lacoproductora el propio Sardà, comunicador que saltó de la radio a la tele con 'Juego de niños' (espacio con el que ha vuelto a TVE), rescató el 'late night' con 'Crónicas marcianas' (T-5) y se ha reiventado como tertuliano político en 'La Sexta noche' (La Sexta). Además, es colaborador de EL PERIÓDICO DE CATALUNYA.
Los invitados
En este último adiós, Juan Carlos Ortega recordará con ironía cómo Sarda era una persona tan preocupada por los amigos como por el trabajo bien hecho; Gemma Nierga confesará por qué le imponía tanto; Santiago Segura evocará la primera entrevista que le hizo y Ramoncín, su gran desencuentro.
Asimismo, Boris Izaguirre recordará los grandes líos en los que le metía Sardá, como un curioso viaje a Tahormina, donde le confundieron con María Teresa Campos. Incluso Paco Marhuenda, con quien 'se pelea' verbalmente en las tertulias televisivas, desvelará lo que sucedía en los descansos.