TÚ Y YO SOMOS TRES

El formidable y bárbaro regreso de 'Vis a vis'

Zulema (Najwa Nimri), en ’Vis a vis’ (Fox). Tú y yo somos tres. Por Ferran Monegal. / periodico

Acaba de estrenar el canal Fox la cuarta temporada de Vis a vis. ¡Ahh! ¡Qué gozada, amiguitos! Otra vez todas en la prisión Cruz del Norte. A Zulema (Najwa Nimri) la pillan fugada en la República Dominicana, la meten en un avión, esposada, y la extraditan. La sientan entre el pasaje, custodiada por un ingenuo policía. Ella le dice, cuando se da cuenta de lo muy verde que está el agente todavía: «¿Quieres follar? ¿No te pone hacerlo a 10.000 metros de altura con una mujer que tiene las manos ataditas?».  Y aquel inexperto pollastre del cuerpo nacional de policía se la lleva al lavabo del avión creyendo que va a pegar el kiki más estratosférico de su vida. Lo único que consigue es que Zulema le arree un mamporro en la cabeza que lo deja contando ovejitas hasta que llegan a Madrid.

Más tremenda todavía es la escena entre la reclusa Altagracia y el nuevo director de la prisión, el canalla y depravado doctor Sandoval. Este médico, en la anterior temporada, violó a Saray (Alba Flores). Ella se vengó rebanándole el cacahuete allí mismo con un cúter. Ahora que este degenerado personaje llega en calidad de director, Altagracia le dice partiéndose de risa: «¿Sabes cómo te llaman ahora las reclusas? ¡Te llaman el doctor Barbie!». O sea, un muñeco sin colita.

¡Ahh! Hay humor, hay violencia, hay sangre, hay tortura, hay talento, mucho talento, en este turbio retrato carcelario, a veces divertido, a veces terrible y profundo. Nos hemos reencontrado con Saray, con La rizos, con esa colosal Goya, la gran Itziar Castro, la actriz que no dejaron  prosperar como profesora en Operación triunfo y que ahora brilla, tan desgarrada, tan formidablemente brutal y tremebunda. ¡Bienvenida esta nueva temporada de Vis a vis! Que ustedes la disfruten.

¿VAN A POR CANAL SUR? .– Parece que a Vox le gustaría cerrar Canal Sur. En este sentido, el secretario general del PP, Teodoro García Egea, ha dicho: «Prefiero no tener Canal Sur y tener a cambio endoscopios en los hospitales de Almería». ¡Ah! Le propongo al señor Egea otra medida más útil, efectiva e igualmente populista: mientras haya un solo hospital sin la dotación necesaria, mientras haya una sola familia desahuciada por no poder pagar el alquiler, el sueldo de sus señorías, diputadas y diputados, que pase a ser el del salario mínimo interprofesional, es decir, 735,90 euros al mes.