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España, condenada por las ayudas a la TDT

El Tribunal General europeo considera que obvió la neutralidad tecnológica y se perjudicó a la opción audiovisual del satélite

Tras siete años batallando en los juzgados, por fin ya hay una sentencia por las ayudas que el Gobierno español dio a la TDT para su implantación en todo el Estado. Y la resolución es contundente: el Tribunal General europeo ha fallado en contra del Reino de España por la forma en que se dieron estas subvenciones, al considerar que se benefició solamente a la opción de la implantación de la TDT vía terrestre (con repetidores), y se perjudicó  a las ofertas de realizar este despliegue vía satélite (no se admitieron). Es decir, no hubo neutralidad tecnológica y se decantó, de manera arbitraria, a favor de la opción terrestre.

 “No es que la opción de desplegar la TDT en España vía terrestre sea más cara que vía satélite, que lo es, es que además los pliegos de condiciones no impedían presentar nuestras solicitudes en todos los concursos que convocaron las diferentes comunidades autónomas”, explica Luis Sahún, director general de SES en España, empresa que gestiona la flota de satélites Astra, y que fue la que presentó las diferentes denuncias contra estos concursos de la TDT ante los tribunales europeos.

Ahora al Gobierno español no le queda más remedio que acatar esta sentencia, que implica, en  primer lugar, devolver todas las ayudas públicas que se han dado desde el 2008 a la implantación de la TDT terrestre. Según cálculos de Sahún, este montante supera los 300 millones de euros, “más los intereses de demora”, apunta el directivo, quien añade que también se tiene que analizar ahora si se deben volver a convocar los concursos de implantación de la TDT con la obligada -y ahora ratificada- neutralidad tecnológica entre la opción terrestre y la satelital. Es decir, el problema que se le plantea a España es bastante importante.

Una empresa líder en el sector de los satélites

Con sede en Luxemburgo, la Sociedad Europea de Satélites (SES) es una empresa líder en el sector y que utilizan los principales operadores de televisión de todo el mundo (en España, Movistar+). Actualmente tiene alrededor de 50 satélites en activo que cubren más del 99% de la Tierra y, solo en Europa, unos 154 millones de espectadores ven la televisión que transmiten sus satélites. Sus ingresos anuales están entre los 1.800 y 1.900 millones de euros (el 53% del total, en Europa), y su bolsa de contratos está ahora en cerca de 7.300 millones de euros.

Según expertos en este tipo de litigios a nivel europeo señalan que el primer paso de los responsables del sector audiovisual de la Unión Europea es reunirse con las autoridades españolas para negociar cómo se va a cumplir el fallo del tribunal europeo, así como el calendario de su cumplimiento. Difícilmente este calendario estará listo antes del 2016, teniendo en cuenta que el próximo 20 de diciembre habrá elecciones generales en España y este, y otros muchos temas estarán sobre la mesa del nuevo Gobierno español que salga de las urnas. Pero lo que también parece claro es que en la UE son bastante rígidos en este tipo de resoluciones judiciales.

Como ejemplo de cómo funcionan en Europa, Luis Sahún recuerda una condena que tuvo el gobierno italiano, por el que debía devolver unas ayudas públicas por un valor de unos 40 millones de euros. “A los seis meses de no haber cumplido la resolución, se le impuso una multa a Italia de 40 millones de euros, y así cada seis meses hasta que cumpliese el fallo” , explica el máximo responsable de SES en España, quien precisa que la intención de su empresa no es “que España pague multas, sino hacer negocio con España, pero en igualdad de condiciones y por el interés de todos los españoles. Y creemos que nuestra opción por satélite es mejor para el consumidor español” asegura Sahún, quien sentencia: “La decisión de los sucesivos gobiernos de España desde el 2008 ha sido apostar claramente por la TDT terrestre, y estas han sido decisiones políticas y para nada económicas”. 

Cómo llevar la TDT al 4% de la población provocó el problema 

El litigio que ha mantenido estos ocho años SES con España se centra en un caso concreto del plan de implantación de la TDT en España y se centra en el 4% de la población: aquella parte de la sociedad que vive en zonas que, por su orografía, no tendrían acceso a la nueva TDT. Para estos casos, se plantearon una serie de concursos a nivel autonómico en el que diferentes empresas podían concurrir con sus ofertas, y recibir las ayudas del Estado. El problema surgió cuando los pliegos de condiciones beneficiaban claramente a una opción de cobertura (a través de más repetidores de TDT terrestre) y se penalizaba (o no se consideraba) la opción satelital. En ese momento (en el 2008), SES empezó a recurrir los concursos, alegando falta de neutralidad tecnológica.