En el Reino Unido no existe el modelo de tertulia política que abunda en las cadenas españolas. La figura del tertuliano que día tras día opina de lo que se le ponga por delante no existe. El formato de las discusiones sobre los asuntos de actualidad que afectan al país es mucho más estricto y alejado del espectáculo. Insultos, descalificaciones o el quitarse la palabra de la boca, levantando la voz, sería aquí algo inaceptable. El único programa de contenido político a hora de gran audiencia, es el semanal Question Time, en BBC 1, a cargo del veterano periodista David Dimbleby. En ese espacio, políticos de todas las tendencias y celebridades sociales responden a las preguntas del público presente en el estudio, sobre asuntos de actualidad. En otros programas, como Daily politics (BBC2), The agenda (ITV) o The Andrew Marr show (los domingos en BBC1), se mezcla la entrevista, el análisis y el comentario. Los invitados son políticos, periodistas y otras figuras de la vida británica, relacionados con los temas a tratar. B. ARCE
GRAN BRETAÑA
Insultos, interrupciones y gritos no tienen cabida
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