Se llama S.B.. Es una jovencísima muchacha que concursa en Acorralados (T-5). De profesión acróbata vaginal -trabaja en la acreditada sala Bagdad-, esta criatura viene siendo objeto, desde hace dos semanas, de autopsias sistemáticas, con pico y pala, y sin anestesia ni nada. Sus vísceras vienen siendo desparramadas desde hace más de 15 días por los platós de Sálvame diario, Sálvame Deluxe y las galas deAcorralados. Todo arrancó cuando confesó a sus compañeros del reality que su infancia había sido durísima. Nacida en Elx, en el seno de una familia muy pobre y con graves problemas convivenciales (agresiones, alcoholismo, abusos sexuales..), tuvo que ponerse a trabajar a los 6 años. Aprendió a leer y escribir cuando ya era mayor de edad. Y hace pocos meses, gracias a su novio, comprendió la tabla de multiplicar. Tras esta confesión, los mineros y matarifes de T-5 vieron las enormes posibilidades que su pasado les brindaba para llenar horas y horas de televisión a base del descuartizamiento existencial de esta muchacha. Desde entonces se vienen aplicando con una precisión escalofriante. Dos primas, un hermano y hasta la anciana madre -de la que advirtió que no quería ver ni en pintura porque llevan más de siete años sin hablarse-, toda esta parentela, les decía, ha sido sumergida sistemáticamente en los platós del container, y los forenses, frotándose las manos, han ido creando el caldo y fabricando el espectáculo. Tratándose de unas texturas humanas tan humildes, tan desprotegidas, tan vulnerables, la dantesca estrategia de la cadena está saliendo perfecta. Y en este fétido zafarrancho hasta han conseguido que la madre llame a su hija prostituta, momento que ha sido muy celebrado. Para redondear el aquelarre, ha sido expulsada de Acorralados, o sea, que la han sacado de Asturias para sumergirla en breve en los platós de Madrid, enfrentarla a su madre, y que el suplicio alcance su cota máxima.
Lamentablemente, hay tipos de tortura que no vienen tipificados en nuestro Código Penal.
LA PARADA -. Deliciosa retransmisión (TVE-1) de eso que llaman Día de la Hispanidad. Dado que este año la ciudadanía ha sido alejada 200 metros de donde estaban las autoridades y las cámaras, no se han escuchado pitidos, ni abucheos, ni desagradables discrepancias. ¡Ah! Qué hermosa armonía. Fantástico.