El mismo día que tenía que ser juzgado por agredir a quien era su pareja, la jueza tuvo que ordenar su busca y captura. Y es que el procesado decidió no acudir a la vista oral en la que se le acusaba de agarrar a su expareja del brazo cuando estaban en el domicilio familiar y arrojarla contra el sofá en presencia de su hija menor de edad, hechos que habrían ocurrido el 8 de mayo de 2021 en Morales Toro (Zamora), donde residían.