Un juzgado de Madrid investiga el caso de dos cuidadoras de una guardería de Pozuelo de Alarcón a la que acuden los hijos de los futbolistas del Atlético de Madrid Álvaro Morata, Antoine Griezmann, Saúl Ñíguez y Mario Hermoso, por supuestamente maltratar y lesionar a los niños. El juez ha impuesto la orden de alejamiento para una de ellas, la presunta autora material.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Pozuelo de Alarcón ha iniciado los trámites por dos supuestos delitos contra la integridad moral y lesiones en las que se investiga a dos trabajadoras de esta guardería, una como presunta autora y otra por omisión, según han informado a la agencia EFE diferentes fuentes jurídicas.
La investigación empezó tras la denuncia de otra trabajadora del centro, que grabó con su móvil a la cuidadora por las sospechas que tenía sobre su mal comportamiento, tal y como han explicado las fuentes.
El juzgado está ofreciendo a las familias que hayan sido afectadas que se personen en la causa, caso de los jugadores colchoneros Antoine Griezmann, Álvaro Morata, Saúl Ñíguez y Mario Hermoso. Entre los afectados también se encuentra el cantante Huecco.
A la cuidadora que está siendo investigada como la presunta autora material de los malos tratos se le ha decretado, como medida cautelar, la prohibición de acercarse a menos de 500 metros del centro de trabajo y de participar en actividades lúdicas, deportivas, docentes y laborales en las que intervengan menores.
Fuentes policiales han confirmado que se han detenido a las dos trabajadores y que la investigación continúa abierta.
Hay seis niños afectados en principio, ninguno de ellos vástagos de los futbolistas, a priori.