Inyección letal

La muerte deseada del vigilante que disparó contra cuatro personas

  • Este martes, el pistolero de Tarragona recibirá un cóctel de medicamentos que primero lo sedarán y después detendrán su corazón

  • El caso de este hombre, tetrapléjico y con dolores constantes, no tiene discusión médica pero sí judicial

El exvigilante de seguridad autor del tiroteo frente a la sede de Securitas en Tarragona. / Epi_rc_es

Eugen Marin Sabau, el vigilante de Securitas que el 14 de diciembre del pasado año disparó a cuatro personas en Tarragona y que fue abatido por los Mossos d’Esquadra, ha abandonado este martes a primera hora de la mañana las dependencias penitenciarias del hospital de Terrassa y ha sido trasladado a la Unidad de Ciudados Intensivos (UCI) del centro para recibir una inyección letal por voluntad propia. A pesar de que ninguna portavoz oficial ha querido confirmarlo, el proceso ha comenzado sobre las diez de la mañana, según fuentes no oficiales. Pero durará varias horas porque, según Gerard Amigó, su abogado, Eugen es donante de órganos y, tras decretarse su fallecimiento, se mantendrán constantes vitales artificialmente para poder proceder a su extracción.