Las fiestas ilegales preocupan a los cuerpos policiales. Desde la implantación del toque de queda hace más de tres meses, una correa que estranguló definitivamente el ocio nocturno, los intentos de burlar las restricciones sanitarias y correrse una buena juerga nocturna –despreciando la amenaza de una pandemia que ha matado casi a 60.000 personas solo en España– se han multiplicado. Ha habido propuestas de brocha gorda, como 17 personas encerradas en una peluquería del barrio del Verdum a las tres de la mañana, pero también más elaboradas, como una fiesta silenciosa con auriculares en apartamentos turísticos. Los Mossos d’Esquadra se han reunido con hoteleros y empresas de alquiler de casas rurales para advertirles de que hacer la vista gorda también es sancionable.
Picaresca contra las restricciones
Fiestas silenciosas, jarana en la peluquería o guateques en hoteles para burlar el toque de queda
Las celebraciones ilegales van en aumento, un síntoma de agotamiento social ante un encierro intermitente que se acerca al año de duración
Los Mossos d'Esquadra se reúnen con hoteleres y empresarios de casas rurales para advertirles de que no pueden hacer la vista gorda
La ampliación perimetral entregará un "balón de oxígeno" a restauradores y ciudadanos que podrán cambiar de municipio por placer
Un cartel que anuncia el fin de las celebraciones.
Lo más visto
- Pensionistas, solo cobraréis una parte de la paga extra en junio: esta es la razón
- Los Mossos alertan de este método de robo: "Antiguo pero recurrente"
- ¿Qué es el muguet y de dónde viene la tradición de regalarlo el 1 de mayo?
- Barcelona descarta replicar el modelo de ejes verdes al costar su mantenimiento diez veces más que en otras calles
- Estas son las enfermedades que la yuca ayuda a combatir