El Govern ficha a una ingeniera de Veolia para liderar las políticas hídricas

La gestión del agua es una de las grandes prioridades del Govern de Salvador Illa. El mandato arrancó con el anuncio de inversiones y de dos nuevos proyectos: una desalinizadora en el norte de la Costa Brava y la interconexión entre las aguas depuradas del Besòs y las del Llobregat.

Para llevar a cabo estas infraestructuras y comandar las decisiones hídricas, la conselleria de Territori, Habitatge i Transició Ecològica contará con una dirección general de nueva creación centrada en las políticas de agua. Se denominará Transició Hídrica y de ella colgarán ATL (el ente de agua público Ter Llobregat) y la ACA (Agència Catalana de l'Aigua). Esta dirección general, según ha adelantado 'Nació' y ha confirmado este diario, estará pilotada por Concha Zorrilla.

Zorrilla es una ingeniera que desde 2022 trabajaba en el área de residuos de la multinacional francesa Veolia, actual propietaria del Grupo Agbar. Anteriormente, había desarrollado su trayectoria profesional en la empresa CASSA (Companyia d’Aigües Sabadell) y en la compañía sueca de sistemas de recogida neumática de residuos Centralsug. Tiene ya experiencia en el sector público, ya que trabajó también en el Consorci de Residus del Vallès Occidental, en el Ayuntamiento de Sabadell y en el Institut Català de Tecnologia. Además, fue miembro de la junta del Colegio de Ingenieros Industriales. Desde la conselleria destacan la experiencia de Zorrilla en la gestión del agua, un aspecto necesario para que el engranaje ACA-ATL acelere su trabajo para culminar ciertos proyectos.

Impulso al agua

La existencia de la dirección general de Transició Hídrica supone un cambio sustancial. Para la consellera Sílvia Paneque era importante que el impulso a las políticas hídricas fuese ligado a esta nueva área, desde la que se podrá planificar y desarrollar políticamente lo que luego la ACA ejecutará. En los próximos días o semanas, explican fuentes del Departament, Samuel Reyes será relevado de la dirección de la agencia, un cese que ya le ha sido anunciado, y se dará a conocer el nombre del nuevo director o directora. Los cambios en la ACA, sin embargo, no pasarán solo por el cese de Reyes.

La idea es relevar la gerencia de la ACA. Mar León dejará el cargo y será sustituida por Daniel Meroño, que hasta ahora era directivo en la compañía Hidrolem y que acumula años en el sector del agua y en la dirección de proyectos, además de ser militante socialista (iba en las listas de las últimas elecciones por Barcelona, aunque lejos de las posiciones de salida).

El objetivo de la conselleria con la nueva dirección general es que, en paralelo a la planificación de la ACA, se pueda marcar una línea política muy clara en cuestiones de agua. En ATL está previsto que David Vila siga al frente de esta empresa pública. Pese a que Esquerra Republicana ha exigido a decenas de cargos del anterior ejecutivo que dimitan, en estos momentos, la intención en Territori es que Vila pueda continuar dirigiendo ATL. Vila ya ha dado el visto bueno a la propuesta de Paneque.

Continuidad en ATL

Vila tenía como encargo el proyecto de la desalinizadora flotante en el puerto de Barcelona, que ahora ha quedado en suspenso, puesto que el Govern de Salvador Illa no ha comunicado una decisión sobre si mantenerla o no en la planificación. En el resto de ámbitos, ATL tiene por delante la conexión de varios municipios que, con los pozos secos, reclaman recibir agua de este ente público. En líneas generales, está previsto que la compañía pública de suministro en alta crezca durante los próximos años.

Sobre el nombramiento de Zorrilla como nueva directora general, la entidad Aigua és Vida se ha pronunciado de forma crítica, y advierten de que Veolia ni el colegio de ingenieros industriales, que defiende la interconexión de Barcelona con el Ebro, "son referentes de la gestión pública y sostenible del agua".

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