Los presuntos cadáveres de dos surfistas australianos y un estadounidense desaparecidos en Baja California (México) tienen un balazo en la cabeza, ha anunciado este domingo la fiscalía mexicana los familiares que han acudido para identificarlos. "Todos tienen un agujero en la cabeza producido por un proyectil de arma de fuego", ha dicho la fiscal María Elena Andrade.
Una de la hipótesis favoritas de los investigadores en este caso es el de un intento de robo de la camioneta en la que viajaban los turistas que aparentemente salió mal.
El vehículo fue encontrado calcinado no lejos de los cadáveres de los dos hermanos australianos, Jake y Callum Robinson, y del estadounidense Jack Carter, todos treintañeros y amantes del surf, que habían sido vistos por última vez el 27 de abril. Sus cuerpos sin vida fueron hallados en un pozo tras una investigación de la policía mexicana y del FBI. El jueves, autoridades de Baja California indicaron que tres mexicanos habían sido arrestados y estaban siendo interrogados en relación con estas desapariciones.
Violencia de los cárteles
La oficina de la Policía Federal de Estados Unidos en San Diego, suroeste de California, anunció anteriormente que "tres personas fallecidas" fueron "encontradas en Santo Tomás, Baja California", sin revelar las identidades de las víctimas. Santo Tomás se encuentra a unos 45 kilómetros al sureste de Ensenada, en una región de México marcada por la violencia de los cárteles de la droga.