88 años

Muere Felicià Bofarull, miembro de la saga más longeva de la restauración barcelonesa

El propietario del restaurante Los Caracoles entre 1955 y 2006 ha muerto este sábado a los 88 años, ha anunciado la familia

El restaurante cuyas gambas al ajillo vuelven loco a Lenny Kravitz

Agustí y Felicià Bofarull

Felicià Bofarull Dompe, propietario del restaurante Los Caracoles entre 1955 y 2006 y cuarta generación de la saga más longeva de la restauración barcelonesa, ha muerto este sábado a los 88 años, ha anunciado este sábado su familia.

El restaurante lo abrió la familia Bofarull en 1835 en lo más típico del Barrio Gótico barcelonés, en la calle Escudellers, cerca de las Ramblas de Barcelona, con el nombre de Can Bofarull, pero con los años se acabó llamando como uno de los platos que más fama le dieron, Los Caracoles. Desde entonces, cuatro generaciones más de la familia Bofarull estuvieron al frente del establecimiento, que ofrece cocina popular de alta calidad y que representa el segundo restaurante en activo más longevo del mapa gastronómico barcelonés.

La familia Bofarull ha estado al frente de su cocina y su sala desde la inauguración del local en 1835, a cargo de Agustí Bofarull y su esposa. Al principio era un ultramarinos, pero el negocio floreció por el comercio internacional y pronto, con el crecimiento del tráfico marítimo, se convirtió en casa de comidas a manos de la segunda generación, encabezada por Felicià Bofarull Pujol, quien puso taburetes y empezó a servir platillos, entre ellos, el de caracoles.

Reconocido internacionalmente

Adquirió tal fama este plato que popularmente se bautizó a Can Bofarull como Los Caracoles y esta nomenclatura se oficializó en 1915. Con la adquisición del piso de arriba, la apuesta de Felicià Bofarull fue la de dar un paso más y convertir el local en restaurante y se inicia entonces, en 1934, su etapa dorada.

En ello le ayudaron sus dos hijos, Antoni y Ramon Bofarull, que adquirieron el local contiguo, ocupado por un estanco, y tras la Guerra Civil llevaron el local a la excelencia y a la fama con carnes y pescados, mariscos, zarzuelas y 'suquets', cocinados por Ramón y con Antonio en la sala. Numerosas personalidades nacionales e internacionales vivieron la experiencia culinaria de Los Caracoles, entre ellos Joan Miró, Pablo Picasso y Salvador Dalí.

También degustaron sus platos Ava Gardner, Burt Lancaster, Errol Flynn, Charlton Heston, Bing Crosby, John Wayne, Julio Iglesias, Carmen Amaya, Luis Miguel Dominguín, Mark Knopfler, Lenny Kravitz, Jimmy Carter, Robert de Niro, Giorgio Armani, Catherine Deneuve, Jacques Chirac, Eric Clapton, Helena Rubinstein e incluso el entonces Príncipe Felipe de Borbón