Educación

El plan de rescate de las bibliotecas escolares en Catalunya sigue sin llegar a los centros: ¿qué ha pasado con el proyecto?

El proyecto piloto, que debía empezar en septiembre como medida estrella para revertir los malos resultados en comprensión lectora, aún no ha aterrizado en las escuelas, aunque la conselleria afirma que la iniciativa va adelante

Carlos Ortiz: "Si a una caja con libros en un aula lo llamamos biblioteca, a un botiquín lo podemos llamar hospital"

¿Por qué se ha desplomado la compresión lectora de los niños en Catalunya?

Biblioteca de una escuela pública catalana, este curso. / ELISENDA PONS

Una de las medidas 'urgentes' -es decir, a aplicar el curso 2024-2025- presentadas por el grupo de expertos a los que el Departament de Educació pidió diseñar un plan para remontar el fiasco de PISA, apuntaba a la necesidad de "dar fuerza y prioridad al establecimiento del plan de lectura de centro como eje dinamizador de la lectura, promover la biblioteca escolar y la figura del bibliotecario, y los recursos para fomentar la lectura como fuente de placer y de acceso a la información". Se trata de la enésima demanda a la conselleria de la urgencia de rescatar las bibliotecas escolares, cuyo deterioro viene de lejos y es profundo (según las últimas cifras oficiales, más del 40% de los colegios catalanes no tienen biblioteca escolar pese a estar obligados por ley), y cuyas consecuencias se notan desde mucho antes de PISA (los estudiantes catalanes de cuarto de primaria bajaron 15 puntos desde 2016 en el último estudio PIRLS presentado en mayo del 2023, y van con un curso de retraso respecto a Asturias, por ejemplo).