Las fábricas de agua muestran sus entrañas: "Las niñas flipaban"

El desagradable olor que invade la zona donde se acumulan las aguas residuales es tal vez lo que más llama la atención de la visita a la depuradora de El Prat de Llobregat, una de las más importantes de España. "Cuando entras ahí te impacta. Sobre todo, es alucinante pensar que aquello, de forma muy indirecta, acaba llegando al grifo de nuestros hogares", cuenta Amparo Alfonso, una de las decenas de personas que ha decidido aprovechar la jornada de puertas abiertas en las infraestructuras hídricas de Catalunya. "Pensamos que era una buena oportunidad para conscienciar a nuestras hijas sobre la sequía" Amparo Alfonso, visitante La verdad es que impresiona contemplar este punto de la depuradora donde se concentran toallitas, compresas, envases y todo tipo de residuos sólidos que acaban circulando por las cloacas. De ahí, se prensan y se separa lo líquido de lo sólido. Y a partir de este lugar, empiezan los tratamientos avanzados que permiten acabar convirtiendo este fluido repugnante en agua regenerada que después se verterá en el río Llobregat para ser captada de nuevo y potabilizarse. Alfonso ha decidido venir con Toni, su pareja, y sus dos hijas, Martina y Aitana, de 11 y 13 años. "Ellas han flipado con la diferencia que hay entre el agua que entra y la sale de la planta, totalmente transparente, que nos han mostrado en un vaso", detalla. En realidad, no solo las más jóvenes han alucinado: "Yo había visitado depuradoras, pero jamás una así de grande y ha sido una gran experiencia". Alumnas aventajadas ¿A quién se le ocurre alguien visitar una depuradora o una estación regeneradora un sábado por la mañana? En plena crisis hídrica y en la época del interés creciente por la sequía y la crisis climática, para esta y otras familias, el plan ideal del fin de semana ha sido adentrarse en las entrañas de depuradoras, desalinizadoras y observatorios meteorológicos. "Vimos a través de la página web de la Generalitat que se podía hacer y pensamos que era una buena oportunidad para concienciar a nuestras hijas de la actual situación", asegura Alfonso. Al principio de la visita, se han tenido que poner un chaleco y un casco y les han expuesto la teoría. En este punto, un par de familias han tenido que marcharse porque venían con un bebé y les han advertido de que se expondrían a lo que podía suponer un exceso de microbios durante la visita. "Realmente, te das cuenta de la importancia de estos edificios para nuestro día a día", dice Alfonso. En su casa, ya llevan meses ahorrando agua: "Usamos un cubo para almacenar el agua de la ducha mientras se calienta e intentamos reducir el consumo en el baño en general". No tienen manías a la hora de beber agua del grifo. "La pasamos por una jarra filtradora por el tema de los microplásticos y ya está", detalla. Visitar esta planta les ha convencido aún más de la buena calidad de este recurso que llega a los hogares. Utile non subtile legit Mientras Amparo Alfonso y su familia paseaban por la gran depuradora del área metropolitana, unas cuarenta personas disfrutaban de las espectaculares vistas de la ciudad desde el Observatori Fabra. "Nunca habíamos tenido una sequía como esta. Y ante una situación así, debemos asegurar la producción de agua potable en las infraestructuras mientras esperamos a que lleguen las lluvias", les decía el conseller de Acció Climàtica, David Mascort, a los asistentes. "Como la preocupación ciudadana por la sequía está ahí, es interesante entrar en las instalaciones que sanean el agua y en espacios como este, desde donde se analizan los fenómenos meteorológicos", añadía Mascort, que ha calificado el actual momento de "muy complicado". Enseguida ha tomado la palabra Alfons Puertas, uno de los meteorólogos de este observatorio centenario, que ha conducido a los asistentes hasta las espectaculares salas de época. "Utile non subtile legit", se puede leer en una de estas estancias. Significa "escoge lo que es útil, no lo que es sutil". "Este es el lema de la real academia de las ciencias de Barcelona", precisaba Puertas. Sobre la inscripción, se puede ver a un ángel cribando el trigo, separando el grano de la paja. Después de una introducción inicial, se han podido observar los antiguos telescopios. Uno de ellos, el de la imponente cúpula, todavía funciona. Desde la terraza del Observatori Fabra, los que han decidido acudir a estas puertas abiertas han terminado la jornada con una inmejorable panorámica de Barcelona, en un sábado que ha servido para que los fans del tiempo y los que siguen al detalle esta grave sequía pudiesen regocijarse en sus pasiones e intereses.

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