El apagón de la TDT está a la vuelta de la esquina y muchos usuarios comienzan a sentir el pánico de ver como su lista de canales desaparece ante sus ojos. Nada más lejos de la realidad. Ni este adiós afecta a todo el mundo –de hecho, solo los propietarios de un 2% de los televisores de España lo notarán, según datos del Gobierno– ni se trata de una medida irremediable.
Lo primero que hay que saber es qué sucederá exactamente el próximo 14 de febrero, fecha límite establecida para que los grupos de comunicación sustituyan sus canales de definición estándar (SD) a su versión equivalente en alta definición (HD). Si bien son muchos los canales que ya llevan años funcionando en 'simulcast' (combinando la emisión de programas en ambos formatos), hay otros que no han dado este salto todavía, y que deberán hacerlo antes del próximo día de San Valentín.
Por su parte, los pocos usuarios afectados por esta actualización, que permitirá la liberación de ancho de banda para destinarse a la emisión de contenidos en 4K o tecnologías como el 5G, entre otras cosas, podrán seguir disfrutando de sus programas favoritos llevando a cabo las correspondientes adaptaciones. ¿Cómo? Existen varias alternativas.
Tres vías principales
La más eficiente de las opciones, así como la más cara, pasa por cambiar directamente el televisor obsoleto por otro HD. Para aquellos usuarios que no estén dispuestos a realizar este desembolso o prefieran una vía más económica, podrán hacerlo instalando un decodificador con receptor DVB-T y capaz de ejecutar MPEG-4.
Por último, también existe la posibilidad de adquirir un dispositivo como el Amazon Fire TV Stick o el Google Chromecast. En ambos casos, estamos hablando de herramientas que se conectan en el puerto HDMI del televisor y, mediante la conexión a una red wifi, convierten un aparato obsoleto en una 'Smart TV' para poder así instalar las aplicaciones de televisión a la carta de cada canal. Eso sí, la conexión a internet y su posterior configuración serán dos limitaciones que los usuarios deberán sortear antes de poder disfrutar de estas y otras plataformas de 'streaming'.