Ático de Gijón

Mensaje desde el pasado: esto contenía una cápsula del tiempo escondida tras la pared

Un constructor halla al reformar un inmueble una botella con una carta "para las generaciones posteriores" de los obreros que levantaron el edificio

Alfredo Barro sostiene la botella en la que encontró la carta en el ático que está reformando en Gijón. / MARCOS LEÓN

Como el mensaje de un náufrago solo que, en vez de al mar, a la inmensidad del tiempo, esperando quien lo encuentre. Ese alguien fue Alfredo Barro, un constructor gijonés, que nunca en sus años de oficio descubrió algo tan curioso: una cápsula del tiempo detrás de la pared del ático que está reformando en Gijón. La cápsula contiene una carta manuscrita fechada en 1964 y que lleva la firma de los trabajadores que levantaron el bloque de once plantas que hace esquina en la calle Cabrales con Covadonga. La carta estaba dentro de una vieja de botella de coñac, que empleaban los obreros para el vino del bocadillo, y su objetivo es el más humano posible: "Dejar constancia de nuestro nombre a las generaciones venideras".