Desalojo del Estudi 9

Una de las okupas de Santa Coloma puede perder el brazo por tenerlo horas dentro de un bidón de cemento

Inmediaciones del Estudi 9 de Santa Coloma, durante el desalojo de este jueves 30 de noviembre / JORDI OTIX

Fue una de las últimas activistas en ser desalojada de Estudi 9, el inmueble okupado en Santa Coloma de Gramenet. Junto a otra chica había introducido los brazos en bidones de grandes dimensiones llenos de cemento y chatarra para dificultar la tarea de los Mossos d'Esquadra. Los agentes tardaron seis horas en liberarlas y con su salida dieron por finalizada la intervención policial.

Sin embargo, la activista ha pagado un alto precio por su protesta. Según varias fuentes, se encuentra en la UCI y tal vez tienen que amputarle el brazo. En este sentido, los servicios médicos señalan que la extremidad ha estado muchas horas sin flujo sanguineo y por eso ha quedado gravemente dañada. 

Estas lesiones no tienen nada que ver con la intervención policial, según las mismas fuentes. Los agentes empezaron a serrar los bidones a las ocho de la mañana cuando empezó el desalojo y no las liberaron hasta más allá de las dos de la tarde

Dentro de Estudi 9 había seis personas que no fueron detenidas. Además de las dos mujeres habían otros dos que se fueron al entrar la policía hacia otra casa okupada en la misma calle y dos chicas más que se escondieron en un patio de luces innacesible y por eso los agentes tuvieron que tirar abajo una pared. Sólo hubo cierta hostilidad a primera hora cuando llegaron los Mossos que fueron recibidos con lanzamiento de piedras y palos y dos de ellos resultaron heridos leves.

Tras el desalojo se cortaron los suministros hacia el inmueble y se tapiaron los accesos. Unos 60 agentes han participado en el desalojo en el que también participó la Policia Local de Santa Coloma de Gramenet.