Psicólogos en Renfe: "Hay maquinistas con 13 atropellos; primero viene la culpa, luego ven que hicieron lo posible"

No se levantan pensando que atropellarán a alguien. Como un policía no desayuna convencido de que un par de horas después tendrá que desenfundar el arma en un tiroteo en plena calle. Los maquinistas de Renfe saben que es una posibilidad, o más bien una certeza que tarde o temprano cristalizará. Pero están formados, tienen un equipo de psicólogos y, lo que quizás es más importante, hablan y se apoyan entre ellos. Uno de estos conductores acumula hasta 13 arrollamientos; 13 tragedias que generan muchas preguntas, inseguridad, sentimiento de culpa. Pero basta una vez para que la cabeza reproduzca imágenes que jamás se irán. A lo sumo, aprenderán a convivir con ellas.

Marta Pérez de Vargas es la jefa de Psicología de Renfe. Es la responsable de la salud mental de 5.000 maquinistas y de una plantilla total de 16.000 personas. Desde 2016, el operador ferroviario dispone de un servicio externalizado de prevención psicológica que funciona de 9 a 21 horas los 365 días del año. Un mecanismo, sin embargo, que viene precedido de un episodio traumático que vale la pena, sin morbo alguno, reproducir.

Estrés disparado

Cuando se produce un atropello, el maquinista, que previamente ha tirado del freno y ha usado el silbato de la locomotora, tiene que salir del tren para ver en qué estado se encuentra la persona arrollada. "Es un momento de gran estrés emocional", sostiene Pérez de Vargas. Pero no hay otra; por múltiples razones. Primero, porque la prioridad es comprobar el estado de la víctima, y, en el caso de que siga viva, activar las emergencias sanitarias para que hagan lo posible para salvarle, aunque en el 80% de los casos se trate de una persona que intentaba suicidarse, según datos de Renfe.

En segundo lugar, porque tiene en los vagones a decenas, centenares de personas. Y tercero, porque la red ferroviaria se va a ver afectada por el incidente: 60.000 minutos de retrasos y 1.900 trenes afectados en Catalunya por los arrollamientos entre el 1 de enero y mediados de septiembre de este año. Tienen que llamar a los centros de control de Adif (gestor ferroviario) y Renfe (operador público del servicio) para que tomen las decisiones oportunas, ya sea cortes de línea, desviación de trenes, traslado de los pasajeros del convoy afectado y transporte alternativo por carretera, si es menester. Además, como es obvio, de priorizar el estado de la persona que ha sido atropellada.

"Se trata de anular esa idea que perturba al conductor; el sentimiento de culpa inicial, lógico pero irracional"

Una vez pasado el 'shock' es cuando todo cae de golpe. El bajón. "Realizamos un seguimiento con terapia cognitivo-conductual. Cambiando el pensamiento podemos cambiar el comportamiento. Se trata de anular esa idea que perturba al conductor; el sentimiento de culpa inicial, lógico pero irracional. Con el tiempo -señala la psicóloga- se dan cuenta de que hicieron todo lo posible para evitarlo".

El caso de Montmeló

Los maquinistas saben identificar las causas del suceso. Si se trata de personas despistadas en la vía o si es alguien que intenta poner fin a su vida. "La posición que tienen, que salgan de la nada tras un arbusto..., es importante que visualicen el suceso para poder resolverlo psicológicamente". ¿Les da miedo venir a Catalunya a trabajar? "Es cierto que el 60% de los atropellos se producen en Catalunya, pero les puede la ilusión de ser maquinistas". Es, de hecho, una lotería algo macabra: pueden retirarse sin un solo incidente y pueden ser recién llegados y encontrarse con la tragedia. Eso es lo que sucedió, de hecho, con el atropello de Montmeló, pues se trata de un maquinista que llevaba poco tiempo en la empresa.

"A menudo me pregunto qué está pasando en Catalunya; por qué concentra tantos arrollamientos". Se inquiere a sí misma, sin encontrar una explicación lógica. "Creo que es un tema social digno de analizar", prosigue. La media de los últimos años en todo el Estado es de unos 105 atropellos, aunque desde la pandemia, señala, se ha notado un ligero incremento, con 114 en 2022 y 105 en 2023 entre enero y mediados de septiembre.

Falsa valentía

Explica Pérez de Vargas que los maquinistas son ahora mucho más transparentes que antes. Los veteranos no hablaban de estas cosas. Lo masticaban y lo digerían solos, como podían, con una apariencia de falsa valentía. "Antes no estaba bien visto decir que no estás bien, eso, afortunadamente, ha cambiado y podemos evitar que sufran un trastorno de estrés postraumático". en 2016 hablaron con 30 conductores, y en este 2023 ya han sido tratados un total de 105.

Rubén Plaza, técnico de seguridad en la circulación de Renfe y una de las personas que se encarga de formar a los novatos, explica que en los inicios "se intenta mentalizar a los maquinistas de que a lo largo de su carrera tendrán que hacer frente a un atropello". "El momento de bajar del tren para reconocer el cadaver, en caso de fallecimiento, es muy duro, porque puedes encontrarte con una situación muy cruda", señala. Pero además tienen un tren lleno de pasajeros y toda una línea con decenas de miles de usuarios del transporte público que dependen de tu pronta reacción. Mucho más que llevar un tren.

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