Efectos de la crisis hídrica

La sequía reduce (por fin) a mínimos el agua del Ter trasvasada a Barcelona

El Grup en Defensa del Ter pide que el área metropolitana siga usando en el futuro agua regenerada y desalinizada para su abastecimiento

Tres de cada cuatro acuíferos que dependen de la Generalitat se encuentran en mal estado

El 30% del agua que se consume en Catalunya ya es regenerada o desalinizada

El pantano de Sau, con gran parte del pueblo al descubierto, por la sequía / FERRAN NADEU

El clamor era unánime en los pueblos por los que pasa el río Ter. Llevaban desde finales de los años 80 exigiendo soluciones para mejorar un caudal devastado y maltrecho, no solo por la contaminación, sino porque una parte del agua que fluía por el río acababa en los hogares de Barcelona y alrededores, a través de las conexiones del sistema de abastecimiento Ter-Llobregat. Después de muchos años de reuniones, en 2017, se logró sellar a un pacto: se firmaron los Acuerdos del Ter, unos compromisos políticos unánimes por los que se debía ir poniendo fin a este trasvase del río hacia el área metropolitana de Barcelona.