Comisión sobre la pederastia en la Iglesia

La fundación Vicki Bernadet pide más formación para detectar abusos a menores

Patio de una escuela. / ICONNA / JOAN CASTRO

La fundación Vicki Bernadet ha pedido una mayor formación para detectar y frenar los abusos a menores. "La prevención debe ser curricular", ha reivindicado la presidenta de la entidad, Vicki Bernadet, en una comparecencia en el Parlament. Ante los grupos, la entidad ha exigido unas instituciones públicas "estables" y con profesionales "muy formados", un perfil que aseguran que les cuesta encontrar.

"Necesitamos dar a entender que trabajar con infancia pide una responsabilidad extra: cuidado y protección", ha asegurado a su vez la psicóloga Pilar Polo.La entidad ha alertado de la cantidad de casos de abusos entre menores y ha reclamado un protocolo diferente por éstos. Asimismo, Bernadet ha reclamado que los casos de abusos a menores no prescriban, una reivindicación recurrente de todas las víctimas.

Bernadet y Polo han intervenido este lunes en la Comisión de Investigación sobre la Pederastia en la Iglesia del Parlament de Catalunya, donde han insistido en pedir profesionales preparados que garanticen a las víctimas poder "romper el silencio". En este sentido, Bernadet ha denunciado la dificultad que tienen algunas personas en explicar lo que les ha pasado y ha cargado contra las instituciones y los políticos porque "no son motivadores ni dan esperanzas" a los afectados. "Las víctimas me dicen que se sienten más seguras si callan que si hablan: algo hacemos mal", ha lamentado la presidenta de la entidad que lucha por la prevención y sensibilización de la pederastia.

En su comparecencia, la fundación ha puesto cifras sobre la situación. Según han detallado, el 80% de los casos se dan en el ámbito familiar, y el 20% restante en entornos de confianza, como pueden ser la escuela o las extraescolares. De éstos, el 90% no se explican hasta la edad adulta. Entre las razones, la entidad apunta a la carencia de una red de seguridad o un entorno familiar sensibilizado.

"Comunicamos mal y no somos una sociedad madura en cuanto a los abusos", ha asegurado Bernadet. En esta línea, la presidenta de la fundación ha señalado que el componente de "culpa" y "vergüenza" impide que las víctimas se sinceren y ha apuntado que la justicia a menudo desincentiva las denuncias por haber prescrito o por no tener pruebas. "Hablar no da los resultados que quisiéramos", lamentó.

Sin embargo, la portavoz ha explicado que la mayoría de las víctimas quieren un acto de justicia restaurativa: "Hay gente que no pide dinero", ha insistido. Bernadet ha señalado que es necesario poner en marcha desde las instituciones públicas iniciativas donde las víctimas puedan ser atendidas expertos.