La sombra de las elecciones municipales empaña el debate sobre el futuro de la Bassa de Llinars. Mientras decenas de vecinos siguen acampados para defender la recuperación de este espacio, la Generalitat traslada ahora la responsabilidad al ayuntamiento, a los propietarios del terreno y a la empresa que hasta hace pocos días llenaba de tierra la charca para secarla.
Charca polémica
El Govern condiciona el futuro de la Bassa de Llinars a un acuerdo entre ayuntamiento, propiedad y empresa
Un camión llena de arena la charca de Llinars. /
Lo más visto
- La Generalitat dará 15.876 euros a los catalanes menores de 30 años que se den de alta como autónomos
- El pantano de Talarn llega al máximo de su capacidad y empieza a desembalsar agua
- Junqueras dejará la presidencia de ERC para intentar atajar la crisis interna
- Bote de'Pasapalabra': Una F convierte al ‘concursólogo’ Óscar Díaz en ganador de los 1.816.000 euros
- El primer ministro de Eslovaquia, Robert Fico, estable después de ser operado de urgencia tras ser tiroteado