Cómo aprender en el cole justicia global: Terrassa reúne experiencias pioneras en los nuevos 'currículos sociales'

Se habla del auge de la extrema derecha entre niños y jóvenes, de que “ser facha” está de moda, pero no se comenta, o mucho menos, la falta de educación política en las escuelas e institutos. Sobre ella, entre muchas otras cosas, reflexionarán este viernes un grupo de chavales en ‘¿Por qué la juventud acaba siendo activista? Trayectorias educativas y vitales para entender los procesos de compromiso social’, mesa inaugural de las jornadas ‘Cambiar la educación para cambiar el mundo’, un encuentro organizado por una amalgama de organismos que va desde la Lafede.cat al Centre Promotor d’Aprenentatge Servei, el Departament d’Educació o el Consorcio de Educación de Barcelona. En esa línea de tejer las necesarias complicidades entre administraciones y protagonistas, tras la primera mesa de jóvenes, subirán al escenario los representantes de las instituciones organizadoras en otra mesa titulada “Construir sociedades justas; la importancia de fortalecer la educación para la justicia global desde les instituciones públicas”, en la que participará de Joan Cuevas, director general de Innovación, Digitalitzación, Currículum y Lenguas del Departament d’Educació, a Marga Barceló, jefa de la Oficina de Cooperación al Desarrollo de la Diputación de Barcelona. Más allá del necesario debate, las jornadas, que se celebrarán este viernes y este sábado en Terrassa, servirán para realizar un intercambio de experiencias educativas. Durante el encuentro se presentarán 18 “experiencias educativas transformadoras reales” que ya se están llevando a cabo en escuelas e institutos de todo el país, con la idea de poder trasladarlas a otros centros y entidades educativas. Experiencias que trabajan temas como la justicia climática, las economías transformadoras, los feminismos, la interculturalidad crítica, la paz o los derechos humanos, algo que encaja y no poco con la filosofía de los nuevos currículums. Escuelas comprometidas Uno de los objetivos de fondo del encuentro, que celebra su cuarta edición, es, igual que existe una red de escuelas verdes, intentar crear una red de escuelas comprometidas con la justicia global. “Se trata de dar un impulso a la identificación de prácticas educativas transformadoras en el ámbito local, dirigida, especialmente a profesorado de primaria, secundaria y universidad, estudiantes de magisterio y pedagogía, educadores sociales, entidades que trabajan la educación para la justicia global e instituciones y administraciones relacionadas con el ámbito educativo”, señalan desde Lafede.cat. Entre las 18 experiencias que se presentarán este fin de semana en Terrassa -ciudad anfitriona con el objetivo de descentralizar la iniciativa superando el centrismo barcelonés- está la iniciativa de Aprenentatge Servei del INS Ègara que tiene como objetivo "dar a conocer alternativas a la economía convencional" y "mostrar su impacto social positivo"; un servicio comunitario, explican, que "responde a necesidades de entidades de economía social de la ciudad que colaboran con el proyecto". Otro ejemplo será la Biblioteca Humana de Rubí, proyecto con alumnos de segundo ciclo de ESO en que preparan una "biblioteca humana" a través de personas anónimas que hacen de libros y que han vivido una experiencia de discriminación social o de asignación de estereotipos y prejuicios, para reflexionar sobre las causas y las consecuencias de las desigualdades en la sociedad. Otro, muy distinto, como muestra de que los valores pueden transmitirse por muchos canales: un proyecto de gamificación con "perspectiva ecosocial y de género" dirigido a colectivos de jóvenes en situación de vulnerabilidad en Girona.

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Profesores, alumnos y administraciones debatirán durante dos días cómo introducir en el aula valores como la justicia climática o la igualdad de forma estructural a partir de 18 iniciativas ya en marcha

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