Educación y crianza

Móviles monitorizados y relojes con GPS: el fenómeno en auge de la paternidad 'Gran Hermano'

  • Psicólogos y divulgadores recuerdan que conceder autonomía a los hijos y huir de la hipervigilancia es fundamental para su correcto desarrollo

  • A partir de los 14 años, se debe advertir al menor de que su teléfono está 'controlado' familiarmente para evitar problemas legales

Un padre observa su teléfono móvil, donde tiene una aplicación para localizar a sus hijos. / Ferran Nadeu

Susana tiene 11 años y cursa 6º de primaria. Vive en Madrid y es el primer año que está yendo al cole sola. Sus padres le acaban de regalar un reloj inteligente con localizador GPS, que les informa constantemente de su ubicación real. También tiene servicio de teléfono y mensajería, pero solo puede hablar y chatear con sus padres (o con los adultos previamente autorizados). “Viviendo en una ciudad como Madrid, me parece buena idea que mi hija lleve el reloj. Me aporta tranquilidad”, argumenta Esther, su madre.