Efecto de los recortes

La ampliación de desalinizadoras en Catalunya, como pronto, para 2027

El 65% de la inversión prevista en los planes del agua anteriores no se ejecutó debido a la crisis económica y los recortes

El nuevo plan en Catalunya apuesta por el agua residual: recuperar el triple para riego o uso industrial de la que emana de las depuradoras

El embalse de Rialb (La Noguera), se encuentra por debajo del 10% de su capacidad en el episodio de sequía que afecta a Catalunya.  / Foto Jordi V. Pou (EPC)

Lo avisó el gerente del Ens d'Abastament d'Aigua Ter-Llobregat (ATL) a este diario. "Es evidente que, visto la evolución y la situación de la emergencia climática, necesitamos más desalinizadoras en Catalunya", dijo José Miguel Diéguez desde la desalinizadora de El Prat de Llobregat, cuya capacidad ya está en el 90% debido a la sequía. Gracias a esta planta, que puede generar 60 hectómetros cúbicos anuales de agua potable, el área metropolitana de Barcelona puede abrir el grifo, de momento. La crisis económica y las políticas de recortes impidieron que las inversiones de los planes de gestión del agua anteriores se cumplieran en su totalidad: más del 65% del presupuesto previsto no se ejecutó. Es lo que dice el tercer Plan de Gestión del Agua (2022-2027) que prepara el Govern, aún en proceso de alegaciones. Prevé hacer una nueva desalinizadora en Blanes (Girona), pero fuentes del Ejecutivo creen que no estará lista hasta 2027. Mientras, la Agència Catalana de l'Aigua (ACA) confía en triplicar el uso de agua residual para la agricultura o usos industriales.