La Diputación de Barcelona ha recibido 4,5 millones de euros del Gobierno para poner en marcha la primera fase del proyecto Vies Blaves, una infraestructura de 360 kilómetros de caminos peatonales y ciclables en los cauces de los ríos Anoia, Cardener y Llobregat.
Esta partida forma parte de un paquete de ayudas para impulsar planes de sostenibilidad turística, valorado en 615 millones de euros procedentes de los fondos Next Generation, que el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo y las comunidades autónomas han acordado este martes. En total, Catalunya contará con 69,8 millones de euros para invertir en 19 planes de sostenibilidad turística.
Rutas singulares
En el caso de la iniciativa Vies Blaves, los 4,5 millones irán destinados a la primera fase, que corresponde a la Via Blava del río Anoia y recorre cinco municipios de la comarca homónima: Jorba, Igualada, Santa Margarida de Montbui, Vilanova del Camí y la Pobla de Claramunt, ha explicado la corporación en un comunicado.
En esta fase se llevarán a cabo actuaciones de creación y adecuación de itinerarios no motorizados, instalación de sistemas de eficiencia energética, despliegue del sistema de seguridad, comunicación y gestión de la Via Blava o el fomento del turismo activo.
Dichas acciones cuentan con un presupuesto total de 5,47 millones de euros, a lo largo de tres los tres años del periodo de implementación (2022-2024), de los cuales ahora el Gobierno, a través de los fondos europeos Next Generation, aportará 4,5 millones.
Cinco años de puesta en valor
El proyecto Vies Blaves Barcelona, impulsado por la Diputación de Barcelona desde hace cinco años, recupera y pone en valor el patrimonio natural y cultural en torno al parque fluvial más importante de la provincia, a través de la creación y adecuación de itinerarios transitables para la práctica del cicloturismo y del senderismo en torno a los ríos Llobregat, Anoia y Cardener.
El objetivo de la iniciativa, que recorrerá 59 municipios de 7 comarcas, es rehabilitar los cauces de estos ríos y devolverlos a la ciudadanía para su disfrute desde el respeto a la biodiversidad.