Volcán de La Palma

Melisa Rodríguez vive dos evacuaciones en tres días

  • La exportavoz de Ciudadanos tuvo que desalojar su casa en El Paso y, horas después, la de los familiares que la acogieron, en Todoque

Melisa Rodríguez Hernández. / LA PROVINCIA

«Cogí un poco de ropa, el ordenador para poder trabajar, algunas fotos y cuatro libros de mi etapa universitaria, que tienen valor sentimental». Entre los miles de vecinos anónimos afectados por la erupción del volcán en La Palma y que han tenido que ser evacuados de sus hogares de manera repentina, se encuentra la que fuera portavoz adjunta de la Ejecutiva de Ciudadanos y diputada por Santa Cruz, Melisa Rodríguez Hernández. Quien subraya que «no hubo opción a nada más», porque desde que se produjo la erupción, la Guardia Civil fue puerta por puerta alertando a la población para que evacuara sus viviendas. El domingo «esperé a que terminara la rueda de prensa en la que informaron de que la isla seguía en alerta amarilla para ir a darme un baño, pero cuando llegué a la playa empecé a escuchar que la gente hablaba de que ya había explotado el volcán y volví corriendo a casa», rememora Rodríguez, que vive desde hace tres años en El Remo, en la costa del municipio de Los Llanos de Aridane. Apresuradamente y casi sin pensar en lo que dejaba atrás, preparó una maleta con los enseres básicos para trasladarse a la vivienda de unos familiares en el barrio de Todoque. Pocas horas después tuvo que abandonar este enclave, situado a menos de diez kilómetros de su casa, ya que el avance de las lenguas volcánicas lo habían sitiado.