Tenía una enfermedad degenerativa

Una carta y un vídeo para el juez: la historia de la joven que no quiso esperar a la aplicación de la Ley de Eutanasia

  • La mujer, leonesa de 35 años y socia de Derecho a Morir Dignamente, padecía una enfermedad neurodegenerativa y estuvo acompañada por dos amigos

Activistas pro EUTANASIA se concentran en la puerta del Sol mientras  se debe la Ley de la Eutanasia. / David Castro

Tenía 35 años cuando decidió quitarse la vida. La joven hallada muerta el miércoles en Oviedo era ingeniera de profesión, nacida en León en 1986, padecía una enfermedad degenerativa que durante los últimos cuatro años había mermado su calidad de vida. En esas circunstancias, acompañada de dos compañeros de la asociación Derecho a Morir Dignamente (DMD), reservó una habitación en un céntrico hotel de Oviedo y, en la noche del martes, una dosis de barbitúricos terminó con su vida. En la habitación, cuando llegó la Policía Nacional a la mañana siguiente, se encontró una carta dirigida al Juez, una tarjeta de vídeo y el bote de medicamentos.