Es un milagro que una ciudad del tamaño de Barcelona tenga a tiro de piedra una zona de cultivos tan extensa como es el parque agrario del Baix Llobregat, un pulmón flanqueado por coches, trenes, aviones y un río en el que todavía laboran, de sol a a sol, cerca de 30 campesinos, más de medio centenar si se cuenta a los jubilados que mantienen una pequeña porción de tierra. A la lucha agrícola se le une la vinculada a la biodiversidad, a la protección de espacios naturales que son de lo poquito más o menos virgen que queda en la desembocadura de un río que en 2004 ya experimentó, de la mano del hombre, una transformación en su desembocadura, colocando el ocaso del caudal un par de kilómetros más al sur. Para evitar inundaciones, se dijo, pero también para poder ampliar el puerto, pues ahí está instalado, a modo de concesión, una de las zonas de carga de contenedores más hercúlea de toda la infraestructura marítima. El debate se centra ahora en el aeropuerto y la hipotética ampliación de la tercera pista que permita ascender en la liga mundial de aeródromos con la ocupación de los dominios de La Ricarda. Un 'hub' internacional, lo llaman. Los ecologistas, los payeses, los científicos y el Ayuntamiento de El Prat lo tienen muy claro: ni hablar. Los galos de Uderzo pudieron con los romanos. Veremos cómo les va a ellos.
MEDIO AMBIENTE
La Ricarda, la pequeña Galia verde del Baix Llobregat
La zona en la que se quiere ampliar el aeropuerto de El Prat es un humedal del siglo XVII que según los expertos es el espacio natural más valioso del ocaso del río
Un avión gana altura después de despegar por la tercera pista, precisamente, por el lado que AENA pretende extender hacia La Ricarda /
Lo más visto
- Pensionistas, solo cobraréis una parte de la paga extra en junio: esta es la razón
- Estas son las enfermedades que la yuca ayuda a combatir
- Los Mossos alertan de este método de robo: "Antiguo pero recurrente"
- ¿Qué es el muguet y de dónde viene la tradición de regalarlo el 1 de mayo?
- Condenada una aseguradora a pagar una indemnización de 13 millones de euros por "negligencia médica" en un parto en Galicia