Los retrasos en la llegada de las vacunas contra el coronavirus están lastrando los planes de vacunación en España. Catalunya se queda esta semana sin inyectables y ello ha obligado a retrasar la administración de las segundas dosis, un retraso que en principio será de una semana. Desde el punto de vista inmunológico el retraso no será un problema si es de una o dos semanas, pero si se alarga sí que lo será. En este sentido, Robert Güerri, coordinador de hospitalización de covid en el Hospital del Mar de Barcelona, ha advertido de que "si no se puede garantizar a tiempo la segunda dosis, quizás se necesitará poner una tercera".
En Catalunya hay 10.000 personas pendientes de recibir la segunda dosis. Hay un margen de 42 días para administrarla. Magda Campins, jefa de Medicina Preventiva y Epidemiológica del Hospital Vall d'Hebron, ha apuntado que "no nos hemos de preocupar en exceso por el retraso de una o dos semanas en la administración de la segunda dosis. Desde el punto de vista inmunológico no hay problema", ha dicho en declaraciones a TV-3.
Campins ha subrayado que los objetivos de la campaña de vacunación eran "demasiado optimista" y ha llamado a "sacarnos de la cabeza la idea de que en verano el 70% de la población estará vacunada".
El aviso de Güerri sobre esa tercera dosis cobra peso si tenemos en cuenta la alerta de Alemania, que ha señalado que habrá escasez de vacunas al menos 10 semanas, hasta bien entrado el mes de abril.