La consellera de Presidencia y portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha admitido que quieren replantear el sistema de rastreo de posibles infectados por la COVID-19, aunque ha reconocido que el contrato con Ferrovial de momento sigue "vigente" a la espera de que Salud resuelva el proceso para revertirlo.
En la rueda de prensa posterior a la reunión del ejecutivo catalán, Budó (JxCat) ha afirmado que el polémico contrato con Ferrovial para externalizar un "call center" con el fin de rastrear contactos de positivos sigue "vigente".
Objetivo: revertir el acuerdo
Ahora bien, ha asegurado que el Departamento de Salud dirigido por Alba Vergès (ERC) está "trabajando" en cómo revertir dicho contrato y sustituir el centro de llamadas, pero "hasta que no se resuelva" este proceso, ha asegurado, Ferrovial seguirá prestando el servicio.
Tras los brotes en Lleida, la consellera ha abierto la puerta a replantearse el sistema de rastreo: "Cuando tengamos todo este sistema replanteado, que pasa por ver cómo se sustituye el call center -de Ferrovial-, se tendrá que replantear todo este escenario, para si hay una manera más eficiente y efectiva", ha afirmado.