Un agente de los Mossos d'Esquadra fuera de servicio recibió una paliza el sábado por la tarde por parte de un grupo de hombres en Premià de Mar. El funcionario se encuentra fuera de peligro pero ingresado en el hospital. Para recuperarse de las múltiples heridas sufridas en cráneo y caja torácica necesitará ser objeto de intervenciones quirúrgicas. 

El policía observó como en un supermercado de la calle de la Gran Vía del municipio un grupo de hombres amedrentaban a clientes, entre ellos una señora mayor, que habían reprochado a un grupo de jóvenes que no mantuvieran las distancias de seguridad. Se acercó para calmarlos pero los individuos respondieron enfrentándose a él. Desplegó la defensa extensible pero ni siquiera eso los frenó. Acabaron sacándosela de las manos y usándola para golpearlo. La paliza fue grave, con golpes y patadas en costillas y cabeza. 

Los Mossos han activado un operativo para dar con el grupo de agresores. Aún no se ha producido ninguna detención. 

A la misma, las ocho de la tarde de este sábado, otro agente, en este caso en Sabadell, acabó repeliendo con el arma de fuego un intento de allanamiento que sufrió mientras se encontraba en el domicilio. Según fuentes policiales, dos hombres en actitud agresiva –uno incluso esgrimió una navaja– intentaron entrar en su domicilio por la fuerza. El policía efectuó dos disparos con la pistola a través de la puerta y apuntando hacia los pies. Ninguno de los dos asaltantes resultó herido pero se dieron a la fuga. 

Ambos fueron arrestados poco después de este incidente y, según las mismas fuentes policiales, está previsto que pasen a disposición judicial en las próximas horas.