Casi nueve de cada 10 pacientes con dolor crónico son mujeres, según se desprende del primer Estudio de Dolor en la Enfermedad Crónica, siendo las patologías relacionadas con este sufrimiento de las más inhabilitantes para el desempeño de un empleo, hasta el punto de que el 38% se tiene que ausentar frecuentemente de su trabajo. Así lo han puetso de manifiesto este viernes la Plataforma de Organizaciones de Pacientes (POP) y la Sociedad Española del Dolor en la presentación de su estudio en el Congreso de los Diputados.
En un debate posterior a la presentación de los resultados y moderado por el director general de Servimedia, José Manuel González Huesa, se desgranó la relación del dolor con las mujeres y las personas con discapacidad de la mano de la presidenta de la Sociedad Española de Migraña y Cefalea, Isabel Colomina; la vicepresidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados, Ángela Rodríguez; la trabajadora social de Conartritis Lidia Monzón, y el diputado del PP Ignacio Tremiño.
Esta alta representación de la mujer puede deberse, entre otras razones, a que varias de las patologías más prevalentes, como algunas enfermedades osteoarticulares (destacando entre ellas la fibromialgia y síndrome de fatiga crónica), las cefaleas crónicas y la artrosis (el 25%), afectan principalmente a mujeres, debido a diferencias biológicas y hormonales, así como a los diferentes roles de género.
En ese sentido, Colomina puso de relieve que el 82% de quienes sufren migrañas son mujeres y que existe un auténtico "desconocimiento" en la sociedad sobre la prevalencia de muchas enfermedades entre las mujeres por su "componente hormonal".
Estrés y ansiedad
La vicepresidenta de la Comisión de Igualdad, Ángela Rodríguez (Unidos Podemos), demandó más "perspectiva de género, también en la salud", porque, a su juicio, la sanidad está diseñada para"hombres blancos de mediana edad que no tienen, por lo general, ningún tipo de problemas", y recordó el enfoque a veces erróneo que se hace cuando una mujer padece dolor, achacándolo a veces al estrés o la ansiedad.
Por su parte, Lidia Monzón ahondó en esta misma idea y criticó que a las mujeres "se les receta antes ansiolíticos que hacerles pruebas" para descubrir su patología. De hecho, el informe presentado hoy refleja que el 70% de quienes padecen dolor crónico tienen ansiedad o depresión. "Tenemos que empezar a empoderar mucho a los pacientes", reivindicó Monzón.
Por último, Ignacio Tremiño señaló que solo el 47% de quienes tienen este tipo de dolor tienen una discapacidad reconocida, al tiempo que alertó de las dificultades que tienen que afrontar quienes tienen una discapacidad y viven en el medio rural.