Han sido veinte años de espera para conseguir que un tren Euromed hiciera parada en alguna estación de las Terres de l’Ebre. Siempre, durante dos décadas, pasó de largo, entre Castellón y Tarragona, hasta este sábador. A partir de ahora, la estación de L’Aldea (Baix Ebre) presta ochos servicios de Euromed entre semana hasta Barcelona, tres los sábados y seis los domingos. La celebración ha estado a la altura de un día “histórico” para la movilidad de los ciudadanos del Ebro. Así lo calificó el 'conseller' de Territori, Josep Rull, que viajó a bordo de uno de los trenes acompañado del secretario de Mobilitat, Ricard Font.
El despliegue de representantes políticos, la presencia de usuarios en el andén y también de los activistas de la plataforma Trens Dignes Ebre, ha corroborado la relevancia del acontecimiento ferroviario. El Euromed por fin para en el Ebro, pero eso sí, con evidentes limitaciones.
A PRECIO DE REGIONAL
Es cierto que al menos durante un año, los ciudadanos del Ebro podrán viajar a Barcelona en una hora y 40 minutos desde L’Aldea -45 minutos menos de lo habitual-, y además a precio de regional, 12 euros. La Generalitat paga esa bonificación, aportando 1,6 millones de euros, y otros 200.000 en una línea de autobús exprés que permita a los pasajeros que se apean del Euromed llegar en transporte público hasta Tortosa y L’Aldea.
Pero no es un servicio normalizado, porque paradójicamente, se limita a ser un 'by pass' entre dos puntos, L’Aldea y Barcelona: no hay venta de billetes en taquilla entre L’Aldea y Tarragona, ni bonificación acordada a pesar de que se trata de una parada intermedia entre el Ebro y Barcelona. Rull ha asegurado que a partir de enero se añadirá ese servicio. Tampoco es posible viajar desde L’Aldea hacia el sur, aunque el tren se detenga en esa estación, pero ese caso la decisión es de Fomento.
TEMPORAL Y EXCEPCIONAL
Se trata de un servicio temporal y “excepcional” que paga la Generalitat, de momento por un año, mientras la línea R16 siga presentando las deficiencias actuales y a la espera que las principales anomalías sean resueltas por el desdoblamiento de vía que el Ministerio de Foment tiene pendiente en L’Hospitalet de l’Infant. “Es una medida de choque para mejorar la conectividad entre el Ebro y Barcelona”, ha señaladoó Rull. “Hoy es un día de fiesta, que valoramos mucho, pero la lucha por un mejor servicio ferroviario continua”, ha apuntado la portavoz de Trens Dignes Montse Castellà.
Las incidencias y retrasos restan usuarios al tren
Los 40 kilómetros de vía única que restringen la doble circulación de trenes al paso por L’Hospitalet de l’Infant son una de las claves de vuelta para aliviar las deficiencias del servicio ferroviario por la R16. El calendario apunta a mayo del 2017 como la fecha en la que Fomento debe terminar los trabajos. Sin embargo, tanto en esta línea litoral como en la R15, que discurre por el interior del Ebro, las obras para eliminar limitaciones temporales de velocidad proseguirán hasta el 2018. Mientras, el desespero ha expulsado a usuarios de los trenes, y los autobuses han ganado adeptos. La Generalitat calcula que unos 200.000 usuarios se desplazan cada año en transporte público entre el Ebro y Barcelona. De ellos, un 60% lo hace en autobús.