La lluvia que ha empezado a caer este domingo en muchos puntos de la cornisa cantábrica y la ausencia de viento han sido determinates para ayudar a controlar o sofocar parte de los más de 100 incendios que este fin de semana se han registrado en cinco comunidades autónomas, principalmente en Asturias, Galicia y Cantabria.
En Asturias, la más castigada, se llegaron a contabilizar este sábado más de un centenar de fuegos, muchos de los cuales han ido disminuyendo en intensidad gracias las condiciones meteorológicas favorables y a los trabajos de los servicios de extinción.
La zona más afectada sigue siendo el oeste, en concejos como Cangas del Narcea y El Franco, donde las llamas obligaron este sábado al desalojo de varias familias y al corte de la conexión férrea entre Asturias y Galicia y de las dos principales vías de comunicación por carretera, la autovía A-8 y la N-634, que ya están restablecidas al tráfico.
AYUDAS
Este domingo, el presidente asturiano, Javier Fernández, ha anunciado que solicitará al Estado las ayudas correspondientes para intentar paliar los daños originados por este "insólito número de incendios" y se ha felicitado de que no se hayan registrado daños personales. Fernández ha realizado estas declaraciones en el concejo de El Franco, hasta donde se ha desplazado para comprobar los daños ocasionados en uno de los lugares más afectados en la región.
El presidente asturiano solicitará al Estado las ayudas correspondientes para intentar paliar los daños
"Primero vamos a evaluar las pérdidas y una vez que se erradique el riesgo generado por los propios incendios, el Principado actuará dentro de su competencia y solicitará al Estado las ayudas correspondientes", ha precisado el presidente asturiano.
En Cantabria, la llegada de la lluvia también ha permitido aliviar la situación y los 40 incendios que seguían activos la mañana de este domingo se han reducido a una veintena, según ha asegurado el delegado del Gobierno en esa comunidad, Samuel Ruiz.
CONTROLADO EN NAVARRA
Por lo que se refiere a Navarra, también afectada, el Gobierno foral ha dado por controlado el incendio que se declaró ayer en una zona de monte arbolado de la localidad de Igantzi y que avanzaba hacia Lesaka, gracias a que el viento ha amainado y ha favorecido así los trabajos de extinción.
El incendio comenzó por la caída de un árbol sobre un tendido eléctrico y se propagó rápidamente favorecido por el fuerte viento, las elevadas temperaturas y la ausencia de humedad tanto en el suelo como en la vegetación.
También está prácticamente extinguido el incendio que la pasada noche obligó a desalojar dos casas rurales y cinco viviendas cerca del monte Igueldo (San Sebastián) y que arrasó 200 hectáreas, la mayoría de arbusto bajo, favorecido por el fuerte viento.
El alcalde donostiarra, Eneko Goia, ha recordado que los bomberos ya habían advertido a las autoridades municipales y forales de que "la situación era peligrosa, debido a la meteorología sin lluvias que ha caracterizado lo que llevamos de diciembre.
Y en Galicia, también ha quedado extinguido este domingo el incendio que comenzó el sábado en el ayuntamiento orensano de Carballeda de Valdeorras después de calcinar 150 hectáreas de monte raso de una zona de difícil acceso y que llegó a tener varios kilómetros de frente.
La Guardia Civil investigará pero expertos apuntan a la quema de matorral
La Guardia Civil tiene previsto abrir una investigación para determinar qué porcentaje de estos numerosos incendios producidos durante este fin de semana ha sido intencionado, aunque el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha apuntado este domingo como probable causa de los fuegos la quema intencionada con el objeto de conseguir pastos, lo que ha calificado de "error", ya que "está demostrado científicamente que quemar el monte deteriora de manera extraordinaria el suelo". En esa misma línea se han pronunciado diversos expertos consultados por EFE, que apuntan a la quema de matorral para preparar el monte al ganado que sube en primavera. Unas prácticas que se remontan a siglos atrás, según ha explicado Virginia Carracedo, investigadora de la Universidad de Cantabria, pero que antes "se hacían de forma controlada". Para el delegado de SEO/BirdLife en Cantabria, Felipe González, es necesario plantearse una nueva política que no sólo se centre en la extinción y haga mayor hincapié en la prevención y la gestión de los pastos para la ganadería.