INFRAESTRUCTURA PRIORITARIA

Bruselas insta a impulsar la 'MAT' del gas entre Girona y Francia

Avisa a España de que está lejos de cumplir de los objetivos de interconexión eléctrica

Subestación eléctrica de la MAT en Santa Llogaia d’Alguema, en el Alt Empordà. / ARCHIVO / EFE

España sigue siendo una isla energética en Europa con un nivel de interconexiones con Francia que no llega al 4%, muy lejos del objetivo del 10% fijado para el 2020. De ahí que la Comisión Europea siga apostando por una receta contra el aislamiento: más conexiones de gas y electricidad. Su segunda lista de infraestructuras clave, aprobada por el colegio de comisarios y que contiene 196 proyectos, mantiene al gasoducto MidCat por Catalunya entre los elementos que tendrán un impacto directo y positivo en la Península.

«Los mercados del gas y la electricidad aún no están respondiendo como deberían», recuerda el Ejecutivo comunitario. Hay muchos estados miembros, hasta 22, que han logrado progresos importantes y que están en vías de alcanzar el objetivo del 10% de interconexiones eléctricas para el año 2020, pero hay otros ocho que siguen todavía lejos del objetivo. Este es el caso de España y Portugal pero también del Reino Unido, Irlanda, Chipre, Polonia, Italia y Rumanía. En el caso español, la nueva lista mantiene tres proyectos ya identificados como claves el año pasado: el Midcat de Catalunya, una línea eléctrica entre las localidades de Arkale (Navarra) y Argia (sur de Francia) y un cable submarino para conectar Aquitania y el País Vasco.

En la lista también figura otra conexión con Francia. La Comisión Europea no concreta el proyecto aunque el memorando firmado entre París y Madrid apuntaba a Aragón como zona de paso. «Es un proyecto que no se ha especificado todavía. No hay una línea concreta ni sabemos por dónde va a ir» explican fuentes comunitarias. La lista se completa con dos nuevas conexiones eléctricas para unir Teruel y Castellón por el Maestrazgo  y otra línea entre Morella y La Plana.

El hecho de estar incluido en la lista permite, según Bruselas, acceder a un procedimiento de autorizaciones acelerado -de tres años y medio como máximo-, llamar a la puerta de una sola administración nacional para la tramitación del permiso y acceder a financiación.

El informe de Bruselas sobre la energía se presenta a dos semanas de la cumbre sobre el cambio climático (COPS21) de París. La UE irá a esa cita con parte de los deberes hechos. El grueso de los estados miembros ya cumplen con sus objetivos de reducción de emisiones para el 2020 respecto a 1990 -23% en el 2014- y la UE está dispuesta a ir más allá a cambio de un nuevo pacto vinculante que defina el camino para limitar el calentamiento global del planeta a 2º frente a los más de 3º previstos bajo los compromisos actuales.