FRAUDE EN LAS REDES SOCIALES

Antipolítica a golpe de tuit

Los 'bots' difunden contrainformación y hunden tendencias en los debates en la red

Los robots también intervienen en política a través, sobre todo, de Twitter. Redes de cuentas automatizadas, bots, son usados por distintas tendencias para difundir ideas y contrarrestar mensajes. Desde la Yihad, que no duda en valerse de cuentas automatizadas que difunden mensajes en árabe muchas veces sacados del Coran con etiquetas populares para meter miedo, hasta políticos, algunos españoles, que han comprado seguidores para ellos y para otros con intención de difamar al contrario.

«España es uno de los países del mundo donde la acción digital está más avanzada. Hay mucho ciberactivismo y el 15-M fue una clara muestra de ello porque involucró a muchos nativos digitales. Los partidos tradicionales suelen tener seguidores más mayores y más analógicos», afirma Javier Toret, investigador del Instituto Interdisciplinario de Internet (IN3) de la UOC, que dirige Manuel Castells, y coordinador de redes sociales de Guanyem Barcelona. «Ha habido una reacción de los poderes ante la actividad política en la red y se ha gastado mucho dinero en contratar asesorías que pudieran contrarrestarla. Se han comprado seguidores, se han usado robots para desmontar trending topics y se ha publicado contenido para entorpecer la conversación o meter miedo», afirma, recordando el caso de una activista mexicana que fue amenazada de muerte por una campaña con bots en Twitter.

México fue uno de los primeros países en sufrir este problema, explica Rodulfo Rodríguez, analista de la empresa de redes sociales Websays, que ha colaborado en la campaña virtual del candidato Jaime Rodríguez, El Bronco, un alternativo al poder del PRI en el estado de Nuevo León, que ha difundido su mensaje a través de las redes sociales, donde ha recibido ataques organizados con cuentas falsas que difundían vídeos ofensivos.

Pero de los ataques digitales no se ha librado nadie tampoco en España. El verano pasado, el PSOE denunció que sus cuentas más relevantes, como la oficial del partido y la de su líder, Pedro Sánchez, se estaban llenando de perfiles falsos. «Denunciamos el caso ante Twitter y limpiamos la cuenta, aunque nos supusiera bajar el número de seguidores. No queremos que se intoxiquen los debates con mensajes que enlazan a sus páginas o a imágenes de gatos, solo por intoxicar.  Tenemos que crecer por lo que hacemos y porque nuestro mensaje convenza, no importan tanto los retuits», asegura Álvaro Gil, community manager del partido.

«Hay activismo en las redes pero los militantes van por libre, a veces sí les pedimos que nos ayuden con un tema, pero cada uno hace. Con el tiempo estamos creando una estructura», añade y asegura que están muy alerta para que no les cuelen seguidores falsos.

La supuesta compra de seguidores falsos ha salpicado también al PP y a Ciudadanos, según diversas denuncias periodísticas. El partido de Albert Rivera tiene como gurú (y miembro de la candidatura por Alicante en las pasadas municipales) a Juan Francisco Escudero, promotor de #Lahoramágica, un sistema de captación viral de seguidores en Twitter, y al que el blog Bots de Twitter, a través del que ciberactivistas denuncian fraudes con análisis muy detallados, atribuye la propiedad de miles de cuentas automatizadas que han sido usadas para apoyarle políticamente. Escudero no ha respondido a los mensajes de este diario para dar su versión. También el PP está acusado de haber usado bots a favor de María Dolores de Cospedal u otros dirigentes. Este diario intentó sin éxito conseguir la versión de Escudero y del PP.