Un hombre de 43 años, vecino de Olot (Garrotxa), ha sido detenido por los Mossos por morder y dar un puñetazo a los agentes tras provocar un accidente al embestir a un coche en Ripoll. Sobre el arrestado pesan los delitos de conducción temeraria, atentado contra los agentes de la autoridad y negativa a someterse a las pruebas de alcoholemia. El arrestado cuenta con numerosos antecedentes policiales por hechos similares.
El miércoles 17 de septiembre el detenido embistió en la N-260, dentro del término municipal de Ripoll, a otro vehículo que se encontraba parado correctamente al lado de la carretera. El hombre insultó a los dos turistas que llevaban el coche, dio un puñetazo a un mosso y mordió a otro, además de negarse a realizar las pruebas de alcoholemia pese a que mostraba síntomas de ir bebido.
Los turistas pararon correctamente el coche para tomar fotografías. Fue entonces cuando el detenido los embistió por detrás, llevándose por delante su coche. Pese a que el accidente no causó heridos, cuando llegaron los agentes de los Mossos el hombre empezó a ponerse nervioso y agresivo.
Según los agentes, el conductor no quiso colaborar con los agentes autonómicos ni realizar la prueba de alcoholemia aunque mostraba síntomas evidentes de ir bajo los efectos del alcohol. Además, el hombre comenzó a insultar a los agentes y los dos turistas afectados hasta el punto de que dio un puñetazo a uno de los mossos y mordió a otro.