Sierra Leona ha aprobado una ley que busca imponer penas de hasta dos años cárcel para cualquier persona que oculte a un enfermo de ébola, una práctica que la Organización Mundial de la Salud (OMS) cree que ha contribuido a una importante subestimación del tamaño del brote actual de la enfermedad.
La nueva norma, que modifica la Ley de Salud Pública de 1960, fue aprobada el 22 de agosto y será entregada ahora al presidente para su promulgación.
La enmienda era necesaria para obligar a las personas a cooperar con las autoridades, ha afirmado el legislador Ansumana Jaiah Kaikai, quien ha alegado que algunos residentes se resisten a algunas medidas adoptadas para luchar contra el ébola, como la construcción de centros de aislamiento en sus comunidades. "Esta enmienda tiene por objeto hacer frente a estos cuellos de botella, agregó.
El Ministerio de Salud advirtió en junio que era un delito grave dar refugio a alguien infectado con ébola.
Temor al estigma
Sierra Leona ha sido golpeada duramente por el brote actual, al registrar al menos 910 casos y 392 muertes, según cifras publicadas el viernes por la OMS.
El brote más reciente en África occidental ha infectado a 2.615 personas y ha matado a 1.427. Sin embargo, estas cifras no recogen todos los casos, en parte porque algunas familias esconden a los enfermos por temor al estigma que acompaña el diagnóstico, de acuerdo con la agencia de salud de Naciones Unidas.